5 trucos para que tus paredes sean mucho más que blancas
Las paredes blancas son omnipresentes en la decoración de interiores. Su luminosidad, sumada a su sutileza y sensación de calma, hacen que este color sea la decisión de muchas personas para que su casa sea diáfana. Una de los principales atractivos de inundar las paredes con este color es el aire chic que aporta a tu casa. Sin embargo, no tenemos por qué dejar las paredes blancas lisas. Aprovecha los trucos que te ofrecemos hoy en el blog del Mercado del Mueble.
Todos tenemos -o hemos pensado en tener- al menos una pared blanca en casa. Como para cada decisión decorativa, hay miles de motivos personales para tomar esta decisión, que pueden variar entre motivos de iluminación hasta temas de simple concordancia con el resto de la casa. No obstante, hay una constante en la mayoría de esas decisiones: la versatilidad que ofrece una pared blanca. Precisamente sobre ella vamos a hablar hoy en nuestro blog. ¡Vamos a ver qué podemos hacer con esas paredes blancas!
Encálalas
Si lo que buscas en tu casa es un toque mediterráneo, encalar las paredes te va a aportar un toque 100% rústico y costero que no dejará indiferente a ninguno de tus invitados. Es una opción fácil, barata y única. ¡Permítete experimentar gracias a sus diferentes texturas! No hay dos paredes encaladas iguales. Por eso puedes jugar con el encalado: aplícalo a todas las de una estancia, solo a una,… Hay mil posibilidades.
Tu lienzo
Tómala como si fuera un lienzo en blanco. Puedes atreverte y decidir crear tu propia obra de arte, aunque probablemente la mejor opción sea tomarlo como una especie de corcho o tablón en el que plasmar todo eso que te inspira en el día a día. Cualquier producto es aplicable a esta opción, por lo que no lo dudes y enmarca eso que tanto te gusta y apórtale la condición de elemento decorativo. ¡Libertad creativa!
Moldéalas
¿Qué mejor que darle una nueva forma a tus paredes e incluso a tus techos? Combina las diferentes molduras existentes para aportarle un toque clásico y señorial a tu hogar. Una vez elegidas las formas, puedes ir un paso más y elegir diferentes tonalidades de blanco que harán que ese toque vintage que buscas con las molduras sea más creíble.
Dale un toque natural
Acerca tu hogar a tu lado más salvaje y coloca diferentes plantas colgantes en la pared. Estas combinarán su frondoso verde increíblemente bien con elementos decorativos de fibras naturales, como alfombras o marcos de mimbre, yute o esparto. También puedes optar por esta segunda opción simplemente. Solo ten claro que un poco de naturaleza siempre bien a tu casa y que el blanco siempre combina bien con todo. A partir de ahí vuélvete un poco loc@, y si luego te arrepientes, siempre puedes descolgar estos elementos.
O déjala tal y como está
¿No te ha convencido ninguna de las opciones? Quizá es porque ya tienes tan interiorizado el minimalismo que casi los has percibido como un estropicio o opciones demasiado recargadas. No hay problema. Puedes dejar tu pared blanca lisa tal y como la conoces hasta ahora. Potenciará la amplitud y la iluminación de tu casa, dará un efecto más fresco y serio a tu hogar que puede ir en perfecta consonancia con los cambios que estás haciendo para llevar una vida más sencilla y minimalista.
Está claro que tener una pared blanca es una oportunidad de oro para aportar la intención y el carácter que más buscas a tu casa. Si decides que tus muros queden en un blanco descubierto, que sea solo y solo lo haces de manera consciente. ¡Atrévete a sacar todo el color del blanco!
Fotos: Mercado del Mueble y Envato
¿Qué te han parecido estos consejos para darle una segunda vida a las paredes blancas? Recuerda que, si necesitas consejos para llevar a cabo una reforma o proyecto, en Mercado del Muebles estaremos encantados de poder ayudarte en todo lo que necesites. Podemos guiarte y asesorarte para hacer realidad la casa con la que siempre has soñado. Contacta con nosotros, ¡no esperes más!